Durante décadas, la infraestructura de hosting ha sido juzgado por su celeridad, confiabilidad y tiempo activo. Las compañías toleraron periodos cortos de downtime como el coste de hacer negocios, similar a la turbulencia ocasional en un vuelo transcontinental. Pero, ¿qué pasaría si la tecnología pudiera anticipar las inestabilidades antes de https://mosheu504ugq1.daneblogger.com/profile